TÉCNICAS RECOMENDABLES PARA EL ESTUDIO DE LA HISTORIA
¿Qué son las técnicas de estudio?
Las técnicas de estudio son tips para facilitar y mejorar la actitud frente al estudio, integrando la atención y la concentración, distinguiendo lo principal de lo secundario.
Implican no sólo lo visual y auditivo, sino también la escritura, reduciendo la dispersión o haciéndola evidente para el propio sujeto.
La lectura comprensiva, el resumen, subrayar los textos, realizar mapas conceptuales, esquemas, identificar ideas centrales, etc., son las mejores actividades para estudiar temas largos o difíciles. Al clasificar y ubicar los conceptos en lugares diferentes, unidos por flechas que los relacionan se crea una imagen visual que ayuda a recordar por mucho tiempo el concepto aprendido. También el subrayado forma una caracterización en las frases destacadas que en la relectura se enfatizan y permiten comprenderlas mejor.
Algunas técnicas de estudio son:
Subrayado:
El subrayado consiste en resaltar con un color diferente las ideas más importantes dentro de un texto. Está técnica ayuda a la memoria a retener información debido a que las cosas que se resaltan se recuerdan con mayor facilidad, además de que es el elemento base para poder desarrollar otros métodos de estudio como el resumen, los cuadros sinópticos y los esquemas.
El subrayado ahorra tiempo al momento de estudiar, ya que no se tiene que releer todo de nuevo, basta con leer la información que fue resaltada.
Para empezar a subrayar un texto es necesario hacer dos lecturas. La primera debe ser rápida con la finalidad de conocer el texto y el tema, y la segunda de comprensión, es decir analítica y reposada.
En la lectura de compresión se empezará a realizar el subrayado destacando las ideas, fechas, y nombres más importantes. Es de gran ayuda ir haciendo pequeñas anotaciones a los márgenes para completar los datos y aclarar las ideas.
Hay que evitar subrayar los artículos, preposiciones y conjunciones, ya que son irrelevantes.
Aunque esta técnica parezca fácil, requiere de concentración y cuidado para evitar incluir información innecesaria.
Resumen:
El objetivo de un resumen es abreviar un texto o tema en pocas palabras sin cambiar la estructura del texto original; es decir, reducir a términos precisos las ideas fundamentales. Es una abreviación del texto original.
Para elaborar un resumen es necesario:
Comprender el tema.
Conocer la estructura del tema o texto (ideas principales y secundarias).
Subrayar la información más importante.
Hacer un borrador, para después desarrollar una revisión de trabajo.
Hacer correcciones eliminando palabras innecesarias y comentarios.
En un resumen hay que evitar incluir ideas, juicios y reflexiones personales. En todo caso pueden registrarse en un documento aparte, ya que el resumen sólo debe representar las ideas principales de un texto o un autor.
En algunas ocasiones a la hora de elaborar el resumen ayuda tener presentes algunas preguntas clave:
- ¿De qué se trata el texto?
- ¿Cuál es el objetivo fundamental del texto?
- ¿Qué es lo que plantea?
- ¿Qué quiere explicar?
- ¿Qué pone en relieve?
- ¿Qué es lo más importante?
Algo a tener en cuenta es que el resumen, idealmente, no debe exceder el 25% del tamaño del texto original.
Síntesis:
Los requisitos para elaborar una síntesis son los mismos que para un resumen (comprender el tema, conocer la estructura del texto, etc.). Sin embargo el objetivo es producir un texto breve en el que se explique qué es lo que se ha comprendido del texto original expresando las ideas del autor con nuestras propias palabras.
Esquemas:
El esquema es una consecuencia gráfica y ordenada del subrayado. En ella se crean lazos jerarquizados entre las principales ideas que conforman un tema. Es decir, se establece cuáles son las ideas principales, las secundarias y los argumentos de apoyo y se establece la relación que tienen entre sí.
Los esquemas permiten que de una mirada se obtenga una idea clara del contenido y de la estructura de la información, para después poder estudiarla y analizarla a profundidad.
Los esquemas son de gran ayuda para organizar los tiempos de estudio, así como para saber lo que llevamos estudiado, lo que nos falta y en lo que tenemos poner mayor énfasis.
Para elaborar un esquema es necesario:
Hacer una lectura de compresión y elaborar el subrayado.
Buscar las palabras y conceptos clave y enunciarlos en frases cortas.
Ordenar el contenido definiendo el tema central, las ideas principales y las secundarías de forma que se pueda ir desglosando la información.
Elegir el tipo de esquema a desarrollar.
Acordeón:
Se le llama “acordeón” a un pequeño papel en el que se anotan las ideas o conceptos principales de lo que puede venir en un examen para sacarlo durante su aplicación.
No estamos sugiriendo que hagas trampa en el examen, te recomendamos hacer un acordeón sólo como una técnica de estudio. Es muy efectiva porque su elaboración implica leer, revisar la información, extraer las ideas o palabras principales y sintetizarlas al momento de redactarlo. Además anticipar qué preguntas pueden venir en el examen es un excelente ejercicio.
Mnemo_tecnia
Las técnicas mnemotécnicas son un conjunto de estrategias lingüísticas que ayudan a memorizar algo debido a que están basadas en la asociación ideas. Son útiles para recordar fórmulas, fechas, nombres y números.
Las técnicas mnemotécnicas más usadas son:
Palabra-pinza
Consiste en asociar un número con una palabra que rime, la palabra que rima es llamada pinza y es la que se utilizara para asociar la información que tenemos que memorizar.
Lo primero que hay que hacer dentro de esta técnica es seleccionar las diferentes palabras pinza con su número y asociarlas con una imagen mental.
1 / punto 2 / tos 3 / tren 4 / pato 5 / brinco
(La lista puede ser tan grande como sea necesario, siempre y cuando se le conozca bien.)
Ya que se tiene la lista con las palabras pinza de debe ir imaginando cada palabra con la información que vamos a asociar. Por ejemplo, para recordar a Octavio Paz como autor de El laberinto de la soledad, se piensa en el número 1, luego en la palabra punto y luego se asocia una historia:
“Un punto final puso Octavio Paz al terminar El laberinto de la soledad”
Para recordar los conceptos asociados se puede ir directo a cualquier número de la lista sin necesidad de recorrer toda la serie. Es decir, si quiero recordar el concepto 5 puedo ir directamente al número, recordar la palabra pinza y ésta nos dará automáticamente la clave para recordar el concepto o dato que asociamos.
De cadena:
Consiste en vincular los diferentes elementos a memorizar de forma que uno lleve al otro y así consecutivamente hasta recordar todo el conjunto.
La lista debe ser corta y siempre de dos en dos (el primero con el segundo, el segundo con el tercero, etc.). Por ejemplo, si queremos memorizar la siguiente lista de palabras:
botella hoja teléfono disco
Creamos una relación de cada palabra con la siguiente: la botella de agua se derramó sobre la hoja, la hoja tenia anotado el teléfono, el teléfono era de quien me dio el disco.
De relato
Consiste en desarrollar una historia con los elementos a memorizar. No importa el orden, sólo tienen que participar todo los elementos.
Aunque las técnicas mnemotécnicas son un apoyo para memorizar, se recomienda utilizarlas esporádicamente, ya que la asociación que se hace no tiene que ver con el objeto de estudio y lo memorizado será olvidado pronto, en vez de convertirse en un verdadero aprendizaje, que viene con la comprensión.
La toma de apuntes:
es anotar los puntos sobresalientes de una clase o conferencia. Mantiene la atención y se comprende mejor. Hace posible el repaso y el recuerdo.
Estas técnicas suponen la comprensión de lo leído o escuchado. Comprender es lo primero y fundamental. Si no se comprende lo leído, lo subrayado, las notas marginales o el resumen, eso carecerá de valor.
Con el tiempo es importante descubrir cuál es el método más apropiado para interiorizar los conceptos que se estudian. Es importante que se consiga la técnica que brinde mayor y mejor resultado y ponerla en práctica cada vez que se decida estudiar. Así se van formando los hábitos y se logra poner al máximo la capacidad de aprendizaje.
COMO PREPARAR Y HACER UN EXAMEN
Para preparar un examen correctamente es necesario que sepas previamente y con claridad los contenidos que tienes que estudiar.
Esta tarea de estudio te la puede facilitar aclarándote lo que realmente tiene importancia y lo que no, el propio profesor. Es importante saber que tipo de examen nos van a hacer: test, práctico, teórico, de propia producción de las respuestas, concreto y de respuestas cortas, etc.
A partir de ahí ya te puedes ir haciendo una idea de como vas a tener que estudiar: con gran memorización, con conexión de ideas, con todos los datos hasta los de menos importancia, etc.
A partir de ahí es simplemente la puesta en práctica de todas las técnicas vistas hasta ahora:
- Una primera lectura rápida de lo que hay que estudiar.
- Segunda lectura lenta, analítica, con subrayado y notas a los márgenes.
- Confección de un resumen.
- Confección de un esquema o cuadro sinóptico.
- Repaso con lecturageneral por encima, lectura de lo subrayado, lectura del resumen y repaso final a las ideas del esquema.
Si realmente consigues seguir este orden en todas sus fases, los resultados serán realmente buenos y las notas, sin duda alguna, mejorarán.